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El Oso aprende nuevos trucos

Hace un poco más de un mes les había contado sobre el prestreno que tuve de la nueva cerveza de Pivovar U Medvídku. En su momento iba a ser una 16°, algo más oscura que la Oldgott e iba a lanzarse justo después de las fiestas. Lo que pude probar entonces no fue justamente eso sino un experimento que el maestro Veselý estaba llevando a cabo. Había puesto en algunas botellas de esta cerveza ciruelas desecadas. Aún no estaba lista, pero ya se perfilaba como buena e interesante. Por otro lado, la ciruela era casi imposible de distinguir ya que no había estado aún suficiente tiempo.
Resulta que la 16° no fue lanzada para cuando estaba prevista, sino una semana más tarde. El motivo. Decidieron ponerle ciruelas nomás.
Fui una tarde a tomar una Oldgott y me encuentro que ya estaban ofreciendo la novoročné švestkové pivo (cerveza de ciruelas de año nuevo). Pedí una OldGott para entrar en calor y después me animé a probar la nueva.
Justo entonces lo veo entrar al maestro Veselý que al ver que ya tenía el vaso frente a mí, me pregunta ansioso qué pensaba de la cerveza. Acerco el vaso a mi considerable nariz y ya se podía sentir la diferencia. El aroma es de ciruelas en compota que tapa el resto, no deja lugar para nada más, pero es muy agradable e interesante ya que no parece artificial. Pero es al tomarla donde se nota quién la hizo. Lo primero que sentimos en esta cerveza ámbar oscura de espuma tan compacta que se puede comer con cuchara es la fruta, como era de esperarse. Pero después la cosa cambia. Al contrario de lo que pasa con la nariz, en el paladar la ciruela esta notablemente bien equilibrada con el caramelo y los cítricos, dejando casi lo mejor para el final, que es largo y exquisitamente lupulado. Una cerveza simplemente brillante. Me gustaría mucho poder tomarla sin las ciruelas, pero no me puedo quejar.
De lo único que sí me puedo quejar es del precio. A 48CZK el vaso de 0,2l es demasiado alto, especialmente si tenemos en cuenta que medio litro de la deliciosa Oldgott Barique (que está volviendo a su nivel después de la suerte de sobreventa que sufrió durante las fiestas) cuesta lo mismo. No es que sea amarrete, no tengo ningún problema en pagar 111CZK por 0,3l (68 por 0,2l) de la X33, de la cual basta con tomarse un vaso, pero esta ya me parece demasiado cara.
La consecuencia de ésto es que la gente no la está pidiendo en la cantidad que debería, y eso afecta a la calidad de la cerveza. Cuando fui unos días más tarde y quise tomarme otro vaso, el camarero me recomendó que no lo haga porque quedaban solamente 10l en el barril y la cerveza ya no estaba tan buena. Luego de probar un trago, coincidí con él. Si la vendiesen por el mismo precio, pero en una medida más grande, seguramente la gente la pediría más y eso sería mejor para todos, tanto clientes como pivovar.
Por lo que tengo entendido, el problema pasa por los propietarios del lugar que a la hora de tomar decisiones comerciales no son los más sabios.
Pero lo mejor no fue haber podido probar tan deliciosa bebida (mientras estaba fresca, claro) sino poder sentarme a charlar con el Maestro Veselý, darle mi opinión sobre la cerveza (la cual es un honor que haya sido tomada en serio) y enterarme de unos experimentos que han estado haciendo con la OldGott.
Los dueños quieren hacer algo nuevo con las cervezas y esta švestkové fue quizás el primer acierto. Pero probaron con otros saborizantes, algunos que desafían la razón como cocos, naranja, canela y clavo de olor, entre otros. De todos ellos, los únicos que según Veselý salieron buenos fueron ciruela e higos. Pero le quedaban ese día tres muestras experimentales que él aun no había probado. Olivas, cúrcuma y café. Cuando me preguntó si las quería probar con él, se pueden imaginar cuál fue mi respuesta.
Veselý fue al cuarto de fermentación y volvió con tres botellitas y seis vasos. Empezamos por la cerveza con olivas, que nos imaginábamos con no iba a ser muy rica. No nos decepcionó, era intomable, como cualquiera que sepa algo de sabores se puede imaginar. Le siguió la de cúrcuma. Acá la cosa mejoró un poco. Nos gustó el primer sorbo, pero para el segundo, ya parecía que estábamos tomando un jarabe para la tos. El problema, demasiado de la especia. En una concentración menor, puede llegar a ser una cerveza más que interesante. La que se llevó el premio fue la de café. Pivovarský Dum ya hace varios años que sirve cerveza saborizada con café, y me gusta mucho, está me gustó un poco más. Ambos coincidimos que sería lindo hacerla, para el maestro cervecero, quedaría mejor con la 16° como base, y estoy de acuerdo. Veselý terminó la tarde agradeciéndome haber degustado las cervezas en él, y me prometió que iba a explorar las posibilidades de hacer la cerveza con café. Le sugerí que vea si se puede cocer el mosto con granos de café y la idea le gustó mucho. Así que si la llegan a hacer así, ya saben a quién se lo deben....;)

Comentarios

  1. Hola Max, me gusta mucho el blog, y llegue a el atravez de un comentario que dejaste en Hilera, siempre se aprenden cosas interesantes.

    Vuelvo a esta entrada vieja, porque me acorde del tema del cafe que habias comentado y eso me llevo a recordar la nota sobre la Mary Jo.

    Lo que queria es preguntarte si sabes de alguna pivo checa que utilice en reemplazo (parcial o total) del lupulo algun otro vegetal amargo que aporte alfa y/o beta acidos.
    Cuando pense en esto volvi inmediatamente a leer el post de la MJ, pero vi que es saborizada con extracto.

    Puntualmente, el codigo alimentario argentino prohibe "sustituir el lupulo o sus derivados por otros principios amargos". Vos sabras como es este tema alla en Chequia?

    Me gustaria saber tu opinion sobre esto que se me ocurrio.

    Gracias y saludos, Bruno

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  2. Hola Brownie!
    Hasta donde yo sé hay sólo una en producción regular, la elabora Pivovarský Dum, es una cerveza de ortiga. No mue acuerdo si el lúpulo está reemplazado en su totalidad con la hierba, pero que ésta está presente, es seguro.
    De hecho, al ortiga era un ingrediente bastante utilizado en Alemania como preservativo (el principal rol del lúpulo en la cerveza es ése) hasta que se impuso la infame ley de pureza bávara.
    La ley checa, por suerte, no pone ningún tipo de restricciones en los ingredientes de la cerveza. Se atiene a lo dictaminado por la corte europea "todo lo que se pueda usar en comida, se puede usar en cerveza" que hizo que los alemanes habran el mercado para cervezas no elaboradas según su reliquia legislativa.
    Igual el lúpulo nunca va a ser remplazado. Los lúpulos Saaz son parte intrínseca de la cerveza checa. Y el uso del lúpulo en cerveza se remonta a la edad media. Si mal no me acuerdo, fueron las tribus eslavas que se asentaron en lo que hoy es Chequia los primeros en agregar lúpulo a la cerveza (ellos lo usaban en su medicina tradicional).
    Hay cervezas en el Reino Unido y creo que en Bélgica que se elaboran sin lúpulo. No he podido probar ninguna, pero me gustaría.

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  3. Muchas gracias Max por la respuesta.
    La verdad es que hay muchas vueltas de tuerca para darle a la cerveza. Lastima que por estos pagos la cosa sea tan limitada.

    Un abrazo, Bruno

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  4. Las posibilidades de la cerveza son prácticamente ilimitadas. Es por eso que estoy convencido que como bebida, es más compleja que el vino. Donde el vino gana, es en la mística.
    Decís vino, y la mayoría piensa en terroir, DOC, varietales, cosechas, añejamientos, reserva, etc.
    Decís cerveza y la mayoría, en Argentina, piensa en Quilmes.....

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