Lo de hoy es una especie de continuación de lo que publiqué el lunes pasado en donde les contaba cómo la persona de Facebook Argentine Beers se quejaba de que los elaboradores no mencionaban estilos en las etiquetas y que no educaban al consumidor. Al día siguiente AB hacía esta pregunta: "¿De quién es la responsabilidad de educar sobre el mundo de las cervezas? ¿De los productores o de los consumidores? Un par de años atrás habría contestado esta pregunta con un rotundo y firme "¡Nuestra!" (mientras me golpeaba el pecho y me ponía de pie quizas). Me había tomado demasiado en serio eso del "Evangelismo Cervecero" y creía que lo mío era algo así como una misión divina. Bastante tonto, diría. Me sigue gustando difundir la palabra de (lo que yo creo es) la buena cerveza, pero lo hago empleando el método "Tomá, probá esto que te va a gustar", dejando que sea la cerveza la que hable y luego contarle a la otra persona sobre ella si es que tiene interés...
Una exploración de la más divina de las bebidas