Los saludos son agradablemente obligados para estas fechas, como lo son los balances. Incluso los más ateos entre nosotros no podemos resistir desear lo mejor para la navidad y el año nuevo, y este blog no podía ser excepción. Ha sido un año muy intenso para mi en lo personal, pero no quiero aburrirlos con mis historias. Como dije entonces, cuando empecé este blog nunca me imaginé que tanta gente lo leería, y menos que muchos me tomarían en serio y me convertirían en una suerte de referente, me llena de honor, en serio, como que acá en Praga, la gente del mundillo cervecero me considere un periodista. No creo serlo, como tampoco me la doy de experto, sino simplemente de consumidor educado y exigente, sólo doy mi opinión filosófica tratando de escribirla de la manera más linda posible. Eso, se lo debo a la cerveza checa que me inspira y me hace escribir más y a mis lectores que me motivan para seguir haciéndolo. Y es a ustedes a quien quiero agradecer y acercar de manera virtual mis más
Una exploración de la más divina de las bebidas