Hace poco, les comentaba mi experiencias con la misma cerveza en versión original y añejada en barrica y mis conclusiones sobre cuál me había gustado más. El resultado, por ahora, era un empate, con la versión barrica de CCM +Malta gustándome mucho más que la original y l la version barrica de Nøgne-Ø Imperial Stout , gustándome menos. Me quedaba en la bodega una cerveza más de Nøgne-Ø añejada en barrica, God Jul, su especial de navidad, que había pasado tres meses en barriles de whisky Islay. La versión original me había gustado mucho y por supuesto, tenía mucha curiosidad de ver qué efecto había tenido sobre esta cerveza el tratamiento en madera. No del todo bueno, tengo que decir. Lo primero que golpea la nariz cuando se acerca al vaso es un aroma que me hizo acordar a la acetona, para nada agradable. Una vez que este se disipa, deja lugar a mucha madera con alcohol (o a lo mejor así es como huelen el Whisky del tipo Islay, nunca he probado ninguno) que tapa casi por completo
Una exploración de la más divina de las bebidas