Luego de haberlo meditado mucho he decidido que no habrá una tercera edición de la Guía Cervecera para Borrachines . El motivo principal es que no se me canta el culo. Me di cuenta que, al igual que la segunda edición, iba a tener que escribir prácticamente todo de nuevo, lo cual es más trabajo del que estoy dispuesto hacer en estos momentos, en especial teniendo en cuenta que involucraría visitar al menos una buena parte de los muchos Craft Pivní Bary que ha abierto, que, a ojo de buen cubero, parecen seguir el modelo de demasiados grifos y precios excesivos. Sin embargo, y más allá de mis preferencias (y prejuicios), se están volviendo una parte cada vez más importante del paisaje cervecero local y, si quisiese que la guía muestre la escena praguense tan bien como las dos ediciones anteriores, me vería obligado a darles una oportunidad, y, una vez más, no se me canta el culo. Hoy día, no tengo ganas de ir a lugares que me parece no me van a gustar solamente por un proyecto como este.
Una exploración de la más divina de las bebidas