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Hmmmm.... ¿qué era lo que quería decir?


Tenía en la cabeza casi terminado el borrador de una entrada libremente inspirada en un artículo que leí hace poco que me hizo pensar en pubs y boliches, pero voy a tener que encontrarlo; creo que se ahogó un poco con todo lo que tomé el sábado en Černokostelecký Pivovar.

¡Puta madre! ¡Qué bien que la pasé el sábado!

La verdad que Vysmolení es un evento cervecero casi ideal. Lindísmo lugar, cervezas excelentes. Cuatro especialmente elaboradas para la ocasión: una desítka a la que quizás le sobraban las maltas munich (elaborada en Varnsdorf), pero que como primera birra del día fue ideal; una dvanáctka de esas que se les ríe en la cara a los que dicen que las lager rubias son aburridas (elaborada en Kounice, que de a poco se está convirtiendo en una de mis micros favoritas) y dos ahumadas (elaboradas en Přerov), ambas con casi la misma receta, la única diferencia estaba en el tipo de malta ahumada empleada, en ambos casos se una manera sutil. Después, dos birras tiradas directamente de barriles de madera, una a la usanza bávara (soprendentemente brillante 14º de Nová Paka) y Únětická 12º con viejo compresor de aire (notable el carácter que los barriles calafateados y el sistema de dispensado le dan a las cervezas).

Seis cervezas, nada más. Me parece genial. Es un poco ir en contra de la corriente, los eventos cerveceros de hoy día suelen prometer cientos de cervezas diferentes, pero menos puede ser mejor. En apenas un par de horas, uno ya probó todas las birras y a partir de ahí se puede concentrar en lo verdaderamente importante que es seguir tomando y pasarla bien con gente amiga hasta bien tarde a la noche. Hacen falta más eventos de este tipo.
Quería agradecerle también a Milan y a Vodouch por permitirme pasar la noche en la cervecería. No se imaginan lo lindo que es estar tomando todo el día hasta la madrugada con la tranquilidad de saber que hay una cama esperándome apenas subiendo unas escaleras desde el bar. Y qué lindo es despertarse (bueno, no del todo) a la mañana siguiente y desayunar con una gloriosa sopa de ajo y una Porter Checa de 19º madurada en barrica sin calafatear que los muchachos se trajeron de Barcelona.

Mejor fin de semana no se puede pedir.

Na Zdraví!

PS: Me han dicho que las cuatro birras hechas a medida va a aparecer en U Vodoucha y U Slovanské Lípy acá en Praga. Muy recomendadas.

Comentarios

  1. Envidia sana! Me alegra que esas barricas empiezen a sacar buena cerveza!!

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    1. Sorprendentemente, la madera todavía no le ha aportado nada... Pero la cerveza, está igual de buena....

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  2. Interesante el concepto de sólo seis cervezas. Aquí, por ahora, dudo que llamara excesivamente la atención al público. Pero como bien apuntas, rápidamente has probado todo lo que hay y puedes centrarte en socializarte y beber tranquilamente. Podría ser un fantástico complemento; le veo muchas ventajas.

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    1. Este evento, si bien es cervecero, no es un festival o feria cervecera propiamente dichos. Acá el centro son los barriles y el oficio de tonelero como una excusa para que la gente vaya a pasar un día lindo con amigos y familia. En lo que sí sobresale es en que las seis cervezas ofrecidas eran, o bien elaboradas especialmente para el evento, o servidas de una manera única.

      Un festival cervecero necesita de un número mayor de referencias para atraer más gente.

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