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Cayó la primera....

Fue parte del delicioso botín que me traje de la fiesta del martes y una de las únicas dos que no había figurado en ninguna de las listas de ganadores.
Pivo Hotel Beránek es una rareza, sino algo único en el mercado checo. He intentado contactar a la gente de Chodovar y el Hotel para saber si es una partida "custom made" o es simplemente la misma cerveza con otra etiqueta, pero no he obtenido aun respuesta.
Me inclino por la primera posibilidad. Pivo Hotel Beránek es una 13° envasada en una linda botella con tapón de cerámica, como se hacía antes. Chodovar presenta uno de sus productos de esta forma, sin embargo, su 13° la Zamecký Ležák Special viene en botella común y es muy distinta a esta. Lo mismo la Skalný Ležák, que es la que se envasa en este tipo de botella (he degustado ambas y ya tendrán su entrada dedicada).
El martes ver esta cerveza nos puso a hablar de lo bueno que sería lograr que restaurantes de categoría encarguen partidas especiales a cervecerías que tienen capacidad, pero no volumen. Podría significar una explosión en la variedad de cervezas y algo muy bueno tanto para la industria, como para los consumidores. Claro que esto tendría que ser hecho por gente que sepa de pivo del lado de los restaurantes, algo que lamentablemente no parece ser el caso incluso en Chequia.
Pero ahora a la cerveza. Lo primero que me llamó la atención era la enorme cantidad de sedimento en el fondo, lo cual no se ve demasiado en lagers embotelladas y prometía entonces una cerveza sin filtrar de cuerpo interesante.
Al servirla la promesa seguía, una impresionante espuma que no bajaba nunca y un color hermoso, ámbar, pero que no llegaba a ser una polotmavé y con algo de turbiedad. Ya no podía esperar a probarla, pero me contuve lo suficiente para hacer las fotos.

Acerqué el vaso a la nariz y casi no sentí casi nada, bueno, dije, a lo mejor está todavía un poco fría y la espuma no deja pasar los aromas. La dejé reposar un poco mientras servía la cena y volví a intentarlo, ahora sí, unas suaves y demasiado sutiles notas acarameladas, casi nada de hierbas y alcohol, las promesas se estaban empezando a desmoronar como las de un político apenas electo; y al degustarla ya es un político que ha asumido su cargo, a la cerveza le falta cuerpo y, aun más, intensidad de sabores, es chata, con un final casi instantáneo. Decepcionante. La Rohozec 12° que tomé mientras preparaba la cena es mucho más que esta que es supuestamente es una partida especial.
Lo que me gustaría más que nada saber es, como dije antes, si esta cerveza es una partida especial o no, y si lo es, quién fue el que la diseñó. Si fue el cliente, evidentemente no sabe mucho de cervezas, y si fue la cervecería, no creo que el cliente se haya molestado demasiado en probar el resultado. En cualquiera de los casos, una pérdida de tiempo y dinero, hubiese bastado con comprar una buena 12° industrial y el resultado hubiese sido mejor.
Qué oportunidad perdida.

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